RECETA
- 500 g de morcillo troceado en pedazos medianos
- 1/4 de gallina
- 1 cebolla
- 2 zanahorias
- 1 puerro
- 1 puñado de garbanzos
- 3 l de agua
- 1 pizca de aceite de oliva
1Dorar en una cazuela amplia, con el aceite de oliva, la carne troceada, hasta que coja bastante color.
2Añadir la cebolla troceada y rehogar 5 minutos más.
3Añadir el pollo o la gallina, el resto de los ingredientes y cubrir con el agua.
4Cocer a fuego lento por espacio de 1 h.
5Retirar con una espumadera las impurezas que vayan surgiendo en la superficie.
6Pasado el tiempo, colar el caldo cuidadosamente y dejarlo enfriar en la nevera, de manera que la grasa sobrante se solidifique y sea fácil retirarla.
7Utilizarlo para elaborar sopas o salsas, o para añadirlo a nuestros guisos o, simplemente caliente, junto a un puñado de fideos, es un excelente primer plato.
8La carne cocida, debidamente eliminados los tejidos y partes grasas, podremos utilizarla para comerla junto a una buena salsa de tomate o una piperrada. O en tortilla: ropa vieja.