1No lavar los brotes de soya si vienen embalados en plástico, pero refrigérelos hasta que los vaya a cocinar.

2Al refrigerarlos se conserva mejor el crujiente después de cocinarlos.

3Si los lava, escúrralos muy bien antes de refrigerarlos 2-3 horas antes de cocerlos.

4Calentar un wok a fuego vivo hasta que empiece a salir humo.

5Agregar el aceite y dar vueltas al wok. Poner la parte blanca de las cebolletas y en cuanto empiece a sisear, añadir las rodajitas de jengibre.

6Echar los brotes de soja en el wok.

7A fuego vivo, rehogarlos pasando un cucharón o espátula metálica por el fondo del wok y removerlos enérgicamente unos 2 minutos para que se hagan por igual.

8Espolvorear de sal hacia el final del tiempo de cocción, agregar las partes verdes de la cebolleta.

9Los brotes de soja tienen que quedar crujientes y soltar muy poca agua.

10Pasarlos a una fuente de servicio caliente.

11Mojar con la salsa de ostras mezclando ligeramente con un par de palillos o un tenedor y servir.