1Hacemos la masa para la base del bizcocho con todos los ingredientes pasados por la batidora. En la placa del horno colocamos papel de aluminio o de hornear. Engrasamos con aceite de girasol y extendemos la masa, horneamos a 170º durante 10 minutos (o un poco menos, vigila que no se queme). Dejamos enfriar y desmoldamos cuando esté frío.

2Mientras tanto preparamos el relleno mezclando el queso con los ahumados picados, o preparamos un paté de salmón casero.

3Lo colocamos sobre un trapo limpio o una esterilla o tapete de silicona. Lo untamos con el relleno por la parte oscura del bizcocho, que siempre es más fea.

4Untamos con el relleno por igual por todas partes. Lo liamos con ayuda del trapo o esterilla de silicona. Por toda la superficie untamos con queso crema una capa finita, y envolvemos en lonchas grandes de salmón. Las vamos superponiendo y prensando bien.

5Lo envolvemos en film transparente para que se apriete y compacte y reservamos en la nevera hasta el momento de servir.

6En la foto inferior hemos dejado la parte tostada del bizcocho por fuera. Hemos pasado el brazo de gitano por semillas de sésamo y le ha dado un sabor estupendo. Puedes untar simplemente por fuera con una capita fina de queso crema y pasar después por las semillas de sésamo.

7Una vez frío lo cortamos en rodajas, espolvoreamos con cebollino picado y servimos.