1Extendemos la masa de hojaldre sobre una superficie enharinada. Ya sabes que el hojaldre hay que trabajarlo siempre muy frío. Podemos ponerlo sobre papel de horno enharinado y colocarlo ya en la bandeja donde lo vayas a hornear, así tendrás que manipularlo menos.

2Cortamos el hojaldre en cuadraditos con un cuchillo afilado y humedecido. Los vamos separando un poco unos de otros.

3Con una cucharilla vamos poniendo un poco de cabello de ángel sobre cada cuadradito de hojaldre y lo aplastamos un poco para que quede bien pegado. Sobre el cabello de ángel ponemos unas almendras fileteadas sin apelmazar.

4Horneamos unos 15 minutos en la parte media del horno y con calor arriba y abajo hasta que vemos que el hojaldre está dorado y ha subido y las almendras empiezan a tostarse pero con cuidado de que no se quemen.

5Dejamos enfriar dentro del horno ya apagado y las retiramos para servir. El cabello de ángel se seca un poco en el horneado y ofrece una cobertura consistente, y las almendras y el hojaldre deben quedar crujientes.