1Diluir la levadura en el agua templada y añadir la mitad de la harina mezclando bien y evitando los grumos.

2Dejar reposar la mezcla de 1/2 a 1 hora.

3Añadir la leche bien caliente, el resto de la harina, una cucharadita de sal y otra de azúcar y dejar reposar de nuevo 1/2 hora o más.

4Agregar la mantequilla fundida y las yemas de los 3 huevos y dejar reposar de nuevo.

5Añadir, por fin las claras de huevo batidas a punto de nieve dura, mezclando con cuidado para que no baje la masa.

6Poner al fuego una sartén pequeña (unos 12-15 cm. de diámetro) y untarla de mantequilla.

7Cuando esté bien caliente echar un cacillo de la masa y extenderla bien, en cuanto empiece a cuajar darle la vuelta.

8Repetir esta operación hasta que no quede masa.