RECETA
Lasañas con sopa de morillas y níscalos
- 200 gr. de morillas frescas (la receta no sería la misma con este hongo secado),
- 200 gr. de níscalos,
- 24 hojas de lasañas frescas,
- 4 cebollitas de verdeo,
- 1 echalota o escalonia,
- 1 limón,
- Perejil abundante,
- 1 dl. de Jerez oloroso,
- 3.5 dl de crema de leche espesa,
- 50 gr. de parmesano rallado,
- Mantequilla,
- Sal y pimienta.
1Lavar y limpiar cuidadosamente en agua corriente las morillas, que tienen la mala costumbre de esconder arenilla y tierra en sus alveolos.
2Cortarlas en 2 si necesario, secarlas.
3Limpiar los níscalos y cortarlos según su tamaño.
4Picar la echalota muy fina, picar el perejil.
5Cortar los tallos de las cebollitas de verdeo en trozos de 1.5 cm de largo, las cebollitas en rodajitas.
6Glasearlas en un poco de mantequilla y reservarlas.
7Poner una buena nuez de mantequilla en la sartén y echar morillas y níscalos a buen fuego para que frían sin dorar durante 3-4 minutos revolviendo a menudo.
8Agregar las echalotas y dejar murmurar suavemente hasta que los jugos se hayan evaporado.
9Agregar entonces una cucharada de café de zumo de limón, salpimentar, mojar con el jerez oloroso y continuar la cocción a cubierto por 10 minutos.
10Agregar la crema, el perejil y las cebolletas, dar un buen hervor y rectificar el sabor si necesario.
11Entretanto habremos puesto a hervir agua con sal y cocinaremos en ella las lasañas al dente según el gusto de cada uno.
12Para servir, sacaremos las hojas de lasaña una a una, las escurriremos y secaremos; en cada plato precalentado pondremos tres, sobre ellas 2-3 cucharadas de la sopa cremosa de hongos y cubriremos con otras tres hojas.