1Echar el arroz en 3 litros de agua hirviendo, cocerlo 3 minutos y escurrirlo.

2Echarlo a continuación en la leche hirviendo a la que se habrá añadido la sal y la vainilla. Tapar la cazuela y dejar que cueza a fuego muy lento 45 minutos aproximadamente.

3Cuando el arroz haya absorbido toda la leche, añade el azúcar, las yemas de los huevos, la crema de leche y las claras montadas a punto de nieve. Verter esta masa en un molde y entrarlo en el horno por espacio de un cuarto de hora.

4Mientras tanto, escurrir los albaricoques, reducir a puré la mitad de ellos y alargar este puré con un poco del almíbar que los acogía.

5Antes de servir, desmoldar la masa de arroz, ya fría, cubrir con el puré de albaricoques y decorar con el resto de albaricoques y la fruta confitada. Puede aromatizarse con un poco de Kirsch u otro licor si se prefiere.